Felipe Solá: "Vamos a enterrar cualquier pelea personal con tal de no traicionar a los que nos votaron"

Finalmente, a más de cinco semanas del cierre de las elecciones legislativas del 28 de junio, los ganadores de aquella jornada en la provincia de Buenos Aires tuvieron su acto.

Con fuertes críticas al gobierno nacional y sin precisiones sobre el futuro de la alianza en la Cámara baja bonaerense, Francisco de Narváez y Felipe Solá, diputados electos por Unión Pro, se mostraron unidos y dieron muestras de que comparten objetivos comunes para la carrera de 2011.

Aunque se preocuparon por subrayar la unidad de Unión Pro, no hablaron sobre la forma en que los diputados bonaerenses de la corriente se entenderán en su trabajo diario.

Consultado acerca de los trascendidos que hablan de la formación de un bloque que responda a Solá en la Cámara Baja provincial, separado de los diputados que responden a De Narváez, Solá respondió que no sabe si habrá un bloque único o dos, pero destacó: "Si son dos, van a trabajar juntos".

Luego de las intervenciones de Jorge Macri, referente de Pro a nivel provincial que fue reelegido diputado, y de Jorge D´Onofrio, senador bonaerense electo, en un escenario lleno de mística peronista, que incluyó la presencia de bombos y gran cantidad de dedos en "v" -clásico gesto peronista- Solá y De Narváez tomaron el micrófono.

Fueron vivados por unos 3.000 militantes y dirigentes, en su mayoría peronistas, concentrados en la sede del Club Atenas. Ambos subrayaron su extracción peronista y lo que consideran pecados de la administración kirchnerista, como su política respecto del sector rural.

En un local con el piso cubierto de volantes amarillos que proponían "Mauricio presidente, Francisco gobernador", confirmando sus sospechas, pero que no hacían referencia alguna a su persona, Solá pronunció un discurso muy enérgico.

Dijo que Unión Pro buscará "el poder en 2011", a nivel provincial y nacional, y aseguró que la alianza se mantendrá unida. No negó los desacuerdos, pero minimizó su impacto: "Vamos a enterrar cualquier pelea personal con tal de no traicionar a los que nos votaron", prometió, y logró una ovación.

También fue vitoreado cuando dijo que el "gran perdedor" del 28 de junio fue Néstor Kirchner y cuando acusó al Gobierno de usar el recuerdo de los desaparecidos "para cualquier cosa, incluso para enriquecerse".

De Narváez también cargó contra el Gobierno. "La política no se hace con talibanes como [Guillermo] Moreno ni con obsecuentes como Daniel Scioli", disparó. Y llamó a tener "paciencia" respecto de la definición de futuras candidaturas presidenciales.

En el acto, estuvieron entre otros, el dirigente del sindicalismo rural, Gerónimo Momo Venegas, y los diputados nacionales electos, Eduardo Amadeo; Alfredo Atanasof; Roberto Mouillerón; el diputado provincial Jorge Macri y el ex intendente de Dolores, Alfredo Meckievi.

Fuente: La Nación



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