jueves, 28 de mayo de 2009

Quien conduce Unión Pro?

El consultor ecuatoriano logró marginar de la campaña a Felipe Solá y hasta se da el lujo de afirmar que “para De Narváez perder por poco sería un gran triunfo”. Hasta ahora Mauricio Macri y sus socios bonaerenses lo obedecen, pero la estrategia ya ubicó al espacio al borde de la ruptura y puso en peligro la fiscalización.
Fue Jaime Durán Barba quien definió que había que “desperonizar” la campaña bonarense, y ordenó que se borre de los comeciales a Felipe Solá y todos los peronistas de esa alianza que pintaba bien para hacerle fuerza a Néstor Kirchner, y que se está deshilachando en sus peleas interna, insólitamente acicateadas por las declaraciones del consultor.

Lo más grave es que lo que debería ser una táctica sutil en todo caso –la desperonización de la campaña- se debate por los medios, y hasta Marcelo Tinelli se entera y se mata de risa. O sea, pierde todo su efecto y posiblemente se vuelve un bumerang, ya que fuerza a Solá y los maltratados peronistas a ubicarse en la orilla de la ruptura.

"Debemos hacer correcciones de fondo a la campaña", le reclamó Solá a Francisco de Narváez no bien bajaron del avión que los traía de una recorrida por Junín, anteayer, según refleja una nota de La Nación. El ex gobernador incluso advirtió que la "ausencia de peronismo" en la campaña y en las listas electorales no hará otra cosa que ampliar la brecha a favor de Néstor Kirchner.

"Desconocer la identidad peronista de millones de bonaerenses es restar votos, además de debilitar el control del escrutinio", advirtió Solá a La Nación. "El asesoramiento basado en lo que pudo ser exitoso en la Capital tiene efecto exactamente opuesto en la provincia", fustigó, en alusión a Durán Barba.

No sólo eso: muchas de las listas colectoras que encabezaban dirigentes peronistas cercanos a Solá en diferentes distritos nunca fueron presentadas en el plazo legal previsto por los apoderados de Unión-Pro ante la justicia electoral, lo que acrecentó el malestar, según reveló ayer La Política Online. "Nos engañaron", bramaron en el entorno de Solá. Por si fuera poco, en las últimas horas una veintena de esas listas fue también desestimada por esos apoderados.

Pero la gota que colmó el vaso en la paciencia de Solá fueron las declaraciones a Radio Mitre que el ecuatoriano Durán Barba formuló anteayer. "Los números de Felipe no son tan buenos como los de Macri y De Narváez", aseveró, aunque despectivo, agregó: "su conexión con la red de punteros va a ayudar".
Incluso, las declaraciones de Durán barba anticipando una derrota de De Narváez, volvieron a disparar la paranoia del PJ disidente, que tema un acuerdo secreto entre el empresario y Néstor Kirchner.
Tan grave es la situación que, el propio De Narváez tuvo que desautorizar a su consultor: "Han sido desafortunadas las declaraciones de Durán Barba; lo hizo desde una mirada técnica", afirmó.
En el entorno de Eduardo Duhalde, que prefiere mantener un perfil bajo en la campaña, hay preocupación sobre el desempeño electoral de Unión-Pro. "Hay posibilidades de triunfar en Buenos Aires si se instalan la polarización y el voto útil para vencer al kirchnerismo.
Pero la marginación del peronismo en la campaña afecta la movilización de los dirigentes y punteros. Si esto no hubiera ocurrido, la paliza al kirchnerismo hubiera sido total", advierten.
Y no mencionan por pudor el que tal vez sea el efecto mas pernicioso de esta desperonización: la ausencia de un dispositivo que garantice mínimamente la fiscalización del comicio en el áspero Conurbano.


Fuente: lpo xxzxx

martes, 26 de mayo de 2009

Unión-Pro (Felipe Solá, De Narvaez y Macri) reclamó acabar con la "violencia política"




Denunció al kirchnerismo por hacer "trampas" y también criticó a la justicia electoral.


Felipe Solá, Mauricio Macri y Francisco de Narváez se reunieron ayer en una cumbre para reclamar el fin de "la violencia en la política", denunciar "trampas" en la campaña y criticar a la justicia electoral por haber excluido de sus listas de postulantes a cinco candidatas a diputadas nacionales bonaerenses.
"Todo esto obedece a que Néstor Kirchner tiene miedo de perder las elecciones. Que aparezca un señor Fernando Narváez en una lista con un partido ignoto que exhibe recursos imposibles, para confundir; que nos prendan fuego locales o nos los tiroteen; que haya aparecido incendiada una gigantografía en la Autopista Buenos Aires-La Plata. Tenemos que parar esta violencia política", descargó De Narváez.

El trío se reunió en el Centro Asturiano de Vicente López. Primero De Narváez se mostró en un escenario junto con Felipe Solá ante 400 militantes para presentar a candidatos a concejales y senadores provinciales. Hubo folklore de Unión-Pro, con globos rojos y amarillos, pero al final el público cantó a cappella la marcha peronista. Felipe Solá, de paso, aprovechó para mencionar a Juan Domingo Perón en su discurso.
De Narváez fue más allá, y habló del final del período electoral de Cristina Kirchner: "Tenemos en nuestro espacio político hombres que tienen capacidad de sobra para presidir la Nación en 2011", un lugar que la Constitución le veda, por su calidad de extranjero.
La más aplaudida en el acto en el gimnasio del club fue la candidata Ester Barrionuevo, hermana del gastronómico Luis Barrionuevo.
Ante los periodistas, Mauricio Macri se sumó a De Narváez y a Solá, y bromeó acerca de que se sentía "proscripto", porque, cuando quiso empezar a hablar, un acople en el micrófono se lo impidió. Pero luego, y en serio, dijo estar "preocupado" por la exclusión que dispuso el juez federal Manuel Blanco de las candidaturas de Claudia Rucci y de otras cuatro postulantes bonaerenses.

"El mismo juez que antes habilitó las candidaturas de Kirchner y de [Daniel] Scioli, ahora se pone riguroso en exceso y comete errores", se quejó Macri. Aunque no pudo asegurar que el fallo estuviera motivado en una presión del Gobierno.
Solá, en cambio, dijo que "no es un incumplimiento importante" y que "es sólo una pequeña nimiedad".

Además de Rucci, las otras candidatas cuestionadas son Silvia Majdalani, del macrismo; Natalia Gambaro, del espacio de De Narváez; Silvia Lospennato, cercana al duhaldista Alfredo Atanasof, y Ana María López, del felipismo.

"Es increíble desde el punto de vista del sentido común la decisión de la justicia electoral. Por supuesto que las candidatas tienen los papeles en orden", las defendió Macri.

Gustavo Ferrari, jefe de campaña de De Narváez, anticipó: "Se intentará habilitar a las cinco candidatas cuestionadas. Y, en caso contrario, se ascenderán a las mujeres que siguen para poder completar el cupo, o se hará renunciar a candidatos hombres para que la lista quede equilibrada".

"No me gusta cómo se viene manoseando la elección. Bajemos los decibeles de agresión y hablemos de propuestas", reclamó De Narváez. Macri dijo que era una "trampa" la postulación del casi homónimo Narváez, candidato del Partido para la Acción Solidaria Independiente Bonaerense (Pasib), que presentó boletas casi idénticas a las de Unión-Pro.

El trío defendió la documentación que presentaron sus candidatas ante la Justicia para justificar sus domicilios bonaerenses. Incluso ayer Claudia Rucci presentó en el juzgado platense de Blanco guías telefónicas que evidencian que vivió siempre en su casa de Parque Leloir, El juez, por radio, anticipó que con esa documentación, que no estaba incorporada al expediente cuando la excluyó, no tendría problema en oficializar su postulación.

Claro que ya falló en sentido contrario. Ahora hay dos caminos: que la Cámara Nacional Electoral, al revisar el fallo, analice estas nuevas pruebas y, eventualmente, le de la razón a Rucci, o que Blanco revea, de oficio, su propia decisión.

A las otras postulantes se les hace más difícil probar que viven en Buenos Aires, y será el tribunal de apelación el que decida su caso. Por ejemplo, Majdalani, legisladora porteña, presentó un contrato de alquiler de una casa en un country en Pilar, y Lospennato, una escritura de una casa en Francisco Alvarez.
xxzxx